La situación provocada por la pandemia ha cambiado nuestras vidas de muchas formas y, cuando menos lo esperábamos, ha llegado el momento de asumir una nueva realidad: el teletrabajo ha entrado en nuestras vidas, y en muchos casos, ha llegado para quedarse.
Según el Instituto Nacional de Estadística, en España tan solo un 5% de los trabajadores realizaban su actividad laboral desde casa en 2019. Sin embargo, el COVID-19 ha aumentado esa cifra hasta el 35% del total. Éramos muchas las personas que soñábamos con el día en el que pudiésemos dormir un ratito más o quedarnos todo el día en pijama. Pero, reconozcámoslo, no ha resultado ser tan fácil como pensábamos, y evitar las distracciones está siendo todo un reto. Por ello, los expertos recomiendan delimitar un espacio exclusivo para el teletrabajo en casa, creando un ambiente laboral separado de la vida en el hogar que permitirá que optimicemos al máximo nuestra productividad y concentración. Aquí van algunos consejos para que puedas adaptar tu casa para crear el home office perfecto:
Elige un espacio
Busca un lugar cómodo, tranquilo, lo menos ruidoso posible y donde no haya distracciones. Sí, eso quiere decir lejos de la televisión o de las tentaciones que pueda haber en la nevera. Puede ser desde un área entera convertida en un despacho, hasta una esquina de la habitación. Sea donde sea, hoy en día hay ya muebles que se adaptan hasta a los rincones más pequeños. Eso sí, intenta evitar las áreas de paso y procura buscar un sitio con intimidad.
Asegúrate de que tu espacio está bien iluminado
Intenta que tu área de trabajo esté cerca de una ventana y tenga iluminación natural. Esto tendrá un efecto positivo en tu estado de ánimo y tu rendimiento. Si no es posible, siempre puedes recurrir a una buena iluminación artificial, preferiblemente difusa y que simule la luz del sol para así evitar que fuerces la vista.
Opta por muebles ergonómicos
Trabajar desde casa no solo ha afectado a nuestro rendimiento laboral, sino también puede pasar factura a nuestra salud si no mantenemos una postura correcta. Intenta hacerte con una silla que se ajuste bien a tus necesidades fisiológicas y de espacio y, sobre todo, que sea cómoda. Y procura sentarte siempre de forma que tu tronco y tus piernas formen un ángulo de 90 grados. De igual manera, trata de que tu mesa se adapte también a ti y tus necesidades, es decir, que esté a la altura adecuada y tengas el espacio necesario para colocar tu ordenador frente a ti a una distancia razonable.
Decora tu lugar de trabajo
Sabemos que parece una tontería, pero decorar el lugar donde desarrollas tus tareas laborales influye positivamente en nuestros niveles de inspiración y creatividad, a la vez que ayuda a infundir un buen estado de ánimo. Aprovecha los beneficios de las plantas, que aportan energía y vitalidad a la vez que purifican el ambiente al absorber la radiación que emiten nuestros aparatos electrónicos, o decora tu pared con cuadros para hacer de ese espacio algo personal que invite a mantener la motivación.
Guarda el orden
Y el orden te guardará a ti. Trabajar en un caos de papeleo y trastos solo dificulta las cosas. Procura mantener todo siempre organizado y, si es necesario, hazte con archivadores, casilleros o cajoneras que te aporten espacio de almacenaje y aprovechen el espacio vertical.
Pero ¿qué hacemos si no disponemos de ese espacio? Sabemos que, aun siguiendo estos consejos, sigue sin ser sencillo para muchos, ya que no todos contamos con un lugar de estas características en nuestra casa. Nosotros te traemos dos soluciones: nuestras hipotecas CAMBIA y SUMA. Con CAMBIA, podrás disfrutar de una nueva casa que se adapte a tus necesidades mientras vendes la otra con toda tranquilidad. Así de sencillo. O, si lo que prefieres es algo más personal, puedes aprovechar nuestra hipoteca SUMA, con la que te financiamos la compra y la reforma de tu vivienda para que puedas hacerla a tu gusto.