Para vivir en una casa solo hace falta que tenga cuatro pareres y un techo. ¿O no? Existe una gran diferencia entre lo tú puedes pensar que necesitas en una casa para entrar a vivir y lo que estiman las administraciones.
La primera de esas diferencias tiene nombre propio: cédula de habitabilidad. ¡Sigue leyendo, que esto te interesa!
¿Qué es la cédula de habitabilidad y por qué es importante?
La cédula de habitabilidad es un documento administrativo que acredita que una vivienda cumple las condiciones básicas mínimas para vivir en ella en términos de salubridad, higiene y seguridad de la edificación.
En otras palabras, es una garantía de que la casa no se vendrá abajo, que los sistemas sanitarios funcionan y que cumple una serie de criterios mínimos en términos de superficie de la casa (no todos los tamaños valen) o altura. Lo mínimo, estarás pensando, ¿no? ¡Pues es más importante de lo que parece!
Además, es un documento necesario para comprar o vender una casa e incluso dar de alta los suministros del hogar en varias comunidades autónomas. Este es el caso de Cantabria, Asturias, Baleares, Cataluña, Extremadura, La Rioja, Murcia, Navarra y Valencia. En otras comunidades la cédula de habitabilidad se ha sustituido por la licencia de primera ocupación.
Cómo se consigue
Igual que hay comunidades que la exigen y otras que no, los requisitos para conseguir la cédula dependen de cada Ayuntamiento y aquí, cada maestrillo tiene su librillo, como suele decirse.
Lo que no cambia es el proceso en general (¡menos mal!). Así, necesitarás que un arquitecto o un aparejador inspeccione la casa y emita un certificado, que es lo que presentarás para que te den la cédula.
La validez de la cédula es de 15 años, aunque es posible que necesites una nueva si realizas una gran reforma en la vivienda que afecte a su estructura.
¿Se puede escriturar sin cédula de habitabilidad?
Nos gustaría decirte que “sí”. Y es que somos más de “síes” que de “noes”, pero ya sabes que en Hipotecas.com nos gusta ser siempre claros y transparentes. Y es que la respuesta depende de cada comunidad autónoma. Hay comunidades que sí permiten escriturar la vivienda sin la cédula de habitabilidad y otras que no. Por eso es importante que te informes antes de comprar la vivienda.
También hay una excepción a la norma general, la primera es cuando la casa que se vende necesita una reforma integral. En ese caso sí se podrá escriturar sin la cédula, pero habrá que conseguirla después de hacer las reformas para poder entrar a vivir.
Para estos casos también existen hipotecas para comprar casa y reformar en las que no se suele solicitar este documento. En una hipoteca para comprar casa es posible que la entidad financiera sí lo pida.
Qué hacer si tu casa no tiene la cédula de habitabilidad
Imagina que te han vendido una casa sin cédula de habitabilidad o que ya has firmado el contrato de arras sin comprobarlo. ¿Qué puede pasar en esos casos? Pues básicamente que tendrás que preocuparte de obtenerla.
Y es que necesitas disponer de la cédula o de la licencia de primera ocupación para poder habitar la casa e incluso para dar de alta suministros como el agua o la luz.
A modo de ejemplo, imagina que un promotor ha terminado la obra y te emplaza a firmar la escritura de la vivienda, pero todavía no dispone de la cédula de habitabilidad. En este caso podrías negarte a firmar hasta que no disponga del documento, informando de las razones.
Esta es una de las razones por las que es importante revisar ciertos datos antes de comprar casa, como por ejemplo averiguar si la vivienda ya está hipotecada.
¿Puedo solicitar una hipoteca si la casa no tiene cédula de habitabilidad?
Aunque la cédula de habitabilidad no es obligatoria, es muy probable que sin ella no te concedan la hipoteca, ya que comprar una vivienda sin este certificado no es legal ni seguro. Por lo tanto, es muy recomendable que lo tengas si estás pensando en comprar una casa.