Una hipoteca para comprar casa supone un desembolso importante y un gasto mensual fijo cuando se suma la hipoteca. Alargar los años de la hipoteca es una forma de reducir este impacto mensual. En otras palabras, de rebajar la cuota que pagas por la hipoteca, aunque a coste de pagar más intereses totales al final del préstamo.
En este post vamos a repasar si existen ayudas públicas para pedir una hipoteca o hacer frente a ello y hasta cuándo puedes alargarla.
¿Existen ayudas públicas al contratar una hipoteca?
La mayoría de las ayudas públicas se centran en la compra de la vivienda en general, no tanto en el vehículo de financiación en particular, la hipoteca. Esto no quiere decir que no existan algunos programas específicos.
El más importante a nivel nacional es el Plan Estatal de acceso a la vivienda 2022-2025, que cuenta con un programa de subsidiación de préstamos convenidos. En otras palabras, subvencionar una parte de la cuota de la hipoteca.
Esta ayuda estatal la gestionan después las comunidades autónomas, que disponen de sus propios programas de ayuda para la compra de la vivienda. Algunos de ellos sí que afectan a la hipoteca con medidas como avales públicos para financiar el 100% de la compra de la vivienda o convenios especiales con determinados bancos, como es el caso de La Rioja.
Muchas comunidades autónomas cuentan con programas que reducen los impuestos por comprar casa, especialmente para los jóvenes o las familias numerosas. Algunas de estas comunidades son, entre otras, Andalucía, Cataluña, Canarias, Cantabria, Castilla y León, Madrid, Navarra y Comunidad Valenciana.
En resumen, si estás pensando en comprar casa, te conviene revisar qué programas de vivienda tiene tu comunidad, tanto para la compra como para la hipoteca.
¿En cuántos años puedo pagar la hipoteca?
La duración máxima de las hipotecas depende de cada entidad financiera y también del tipo de hipoteca. El plazo máximo más extendido oscila entre los 30 y los 35 años.
El dato claro para saber cuántos años de hipoteca puedes pedir es tu edad porque la mayoría de las entidades fijan una edad límite para terminar de pagar el préstamo. Esta edad máxima oscila entre los 70 y los 75 años. De esta forma, si tienes 45 años, podrás pedir una hipoteca de 25 años, por ejemplo.
Este plazo puede variar también en función del tipo de hipoteca. Normalmente las hipotecas a tipo variable se conceden a más años, mientras que las hipotecas a tipo fijo tienden a ser más cortas.
La razón es que a las entidades financieras les resulta más complicado estimar cómo se comportarán los tipos de interés en periodos muy largos y por eso limitan la duración de las hipotecas a tipo fijo. De todas formas, esto depende de nuevo de las políticas concretas de cada entidad financiera.
Recuerda siempre que alargar la hipoteca es una forma de reducir la cuota que pagas cada mes. Como contrapartida, al durar más años, también terminarás pagando más intereses en total.
¿Hasta qué edad puedo pedir una hipoteca?
Como con la duración del préstamo, la edad máxima para que te concedan una hipoteca es algo que depende de cada entidad financiera.
Legalmente no existe una edad límite para pedir la hipoteca, aunque sí una edad hasta la que te extenderán el préstamo. Es decir, que las entidades financieras no te van a conceder un préstamo que se extienda más allá de una franja entre los 70 y los 75 años.
Con esto en mente, puedes pedir y conseguir una hipoteca con 60 años, pero como mucho podrá tener una duración de 15 años. Y lo mismo ocurre si solicitas la hipoteca con 50 años. Las condiciones concretas y límites pueden variar según la entidad financiera.
En cualquier caso, recuerda que la edad es solo uno de los aspectos que las entidades financieras valoran a la hora de conceder un préstamo hipotecario. Hay otros puntos como la estabilidad financiera, el porcentaje de la vivienda a financiar o el propio valor de la casa.
¿A qué esperas para descubrir tu hipoteca ideal para comprar una vivienda, reformar o construir tu propia casa?