Imagínatelo: estás tumbado en tu sofá viendo tu serie preferida y te llega una alerta al móvil. Es una venta que acabas de realizar, ahora eres 100 € más rico. Esa es la base de los ingresos pasivos, con los que ganarás dinero sin tener que invertir tu tiempo de forma constante, a diferencia de lo que ocurre con tu trabajo.
Estas son 6 formas de obtener ingresos pasivos y lo que debes saber sobre cada una de ellas:
Invertir en vivienda
Es la forma más tradicional, pura y sencilla de obtener ingresos pasivos. Todo el mundo tiene más o menos claro en qué consiste comprar casa para alquilarla. De forma muy resumida, hay que buscar una buena vivienda, comprarla, ponerla en alquiler y... ¡Voìla! A cobrar una renta todos los meses.
Esa es la esencia de invertir en vivienda para alquilar. A partir de ahí siempre hay pasos adicionales, como un estudio previo de la rentabilidad que vas a obtener por la vivienda, las posibles reformas que haya que hacer y la financiación.
Y es que, la mayoría de las casas para alquilar se compran con apalancamiento, es decir, aprovechando la financiación que permite una hipoteca. Existen hipotecas especiales para comprar casa para alquilar y también hipotecas para comprar casa y reformarla.
Crear y vender un infoproducto
Vender conocimientos también es otra forma de generar ingresos pasivos. Existe todo un mundo de posibilidades alrededor de esta fórmula.
Un infoproducto no es más que un recurso formativo que puede ser un curso online, un manual o guía en PDF o un webinar, por poner algunos ejemplos.
Con este tipo de ingreso pasivo existe un esfuerzo inicial para crear el producto y otro más o menos sostenido en el tiempo para promocionarlo y venderlo. Esto lo puedes hacer con tu propio blog o página web, en plataformas de cursos, a través de redes sociales o anuncios.
Los ingresos que puedes lograr dependen, por un lado, del tipo de producto que vendas y, por otro, del nicho o mercado en el que te muevas. Por ejemplo, puedes vender una hoja de Excel para hacer un presupuesto para comprar casa o para poner en orden la economía familiar por 10 euros o un curso online por 300 euros.
Escribir un libro
En línea con el ingreso pasivo anterior, también puedes lanzarte a escribir. Hoy en día es posible hacer todo el proceso por tu cuenta: escribir, publicar y vender.
Requiere un esfuerzo inicial tras publicar el libro si quieres que funcione. La razón es que necesitarás un poco de promoción inicial para lograr ventas y que se posicione bien dentro de su categoría.
Invertir por dividendo
La inversión es otra forma de conseguir generar ingresos pasivos, aunque no necesariamente una renta recurrente.
Al invertir el interés compuesto hará que ganes dinero sin tener hacer nada, siempre que aciertes con tus inversiones, claro está, porque nunca debes perder de vista que invertir supone asumir un riesgo.
Si lo que buscas es una renta pasiva, es decir, recibir un dinero de forma recurrente en tu cuenta, la estrategia más popular es la inversión en dividendos.
Los dividendos son el dinero que las empresas reparten entre sus accionistas cuando consiguen beneficios. Como ya habrás deducido, la inversión en dividendos consiste en buscar empresas que repartan dividendos año tras año y que además aumenten la cuantía para invertir en ellas. Quienes cumplen con estas características se conocen como los reyes o aristócratas del dividendo, por diferenciarlo de otras empresas que pueden repartir dividendo un año sí y dos no.
Este modelo de renta pasiva genera rentabilidad por dos lados. El primero es por las posibles subidas en bolsa a largo plazo de las acciones en las que inviertes. El segundo es por el dividendo que reparte, que será la renta que percibirás de forma periódica.
Puedes invertir por dividendo eligiendo tú mismo las empresas o a través de fondos de inversión y ETFs que se encargan de la selección.
Dropshipping
El dropshipping es un modelo de negocio o tienda online en el que actúas como intermediario de un proveedor que es el que se encarga de enviar el pedido y también de todo lo relacionado con el almacenamiento.
Tu papel en todo el negocio es captar al cliente a través de tu tienda online o marketplace. El proveedor se encarga del resto, salvo de las reclamaciones. Con el dropshipping actúas con tu propia tienda y si hay alguna reclamación, el cliente te pedirá responsabilidades a ti.
El dropshipping implica realizar un trabajo de promoción de tu página web y de tu tienda, por lo que es un modelo semi-pasivo de ganar más dinero.
Marketing de afiliación
Este modelo es similar al dropshipping con una diferencia: no vendes producto propio, sino que referencias el producto de otras marcas.
Aquí sí que actúas como un intermediario puro donde recomiendas un producto o servicio y te llevas una comisión por ello.
Para hacer marketing de afiliación solo necesitas una cosa: una audiencia. Es decir, un grupo de personas a las que vender.
Para lograr esa audiencia puedes recurrir a páginas web de nicho, donde hables de un producto concreto, una página generalista o a las redes sociales. De hecho, muchos canales de YouTube consiguen la mayoría de sus ingresos gracias a la afiliación.